Después de tantos mundos, submundos y subgéneros varios que han aparecido durante el último siglo, quiero aclarar el significado y todo lo que abarca el género de la novela negra.
Hoy en día, los lectores se confunden con la novela policíaca, de suspense o los thrillers. Cada uno tiene sus características concretas y tienen varias diferencias entre ellos.
Con la definición de las características principales de la novela negra, aprenderás a decidir la lectura ideal según tus gustos. Es muy importante conocer el género para descubrir tus lecturas favoritas. Vamos a ello.
Características de la novela negra
Cuando hablamos de este género, normalmente te viene a la cabeza las típicas novelas oscuras y con multitud de conflictos por resolver. Es un estereotipo muy típico y, en cierta medida, bastante acertado. Estos son las principales características de la novela negra:
- Conflicto social
- La imperfección del protagonista
- La violencia
- La trama y el narrador
Conflicto social
La novela negra siempre tiene un trasfondo social o un conflicto de la sociedad y el detective, policía o protagonista no es ajeno a ello. Todo lo contrario. Se ve envuelto en este conflicto y muchas veces tiene que luchar para salir de él.
La historia se desarrolla en una sociedad decadente y, a veces, con altas dosis de corrupción. Normalmente, la novela negra esconde una crítica social.
El autor retrata los vicios y las bajas pasiones del ser humano con un crimen como telón de fondo. La oscuridad es el decorado perfecto.
La imperfección del protagonista
El protagonista nunca es perfecto. Siempre tiene algún problema con la justicia, alguna adicción como problemas con la bebida o flirtea con la corrupción. A parte del conflicto principal, normalmente un asesinato, el protagonista deberá luchar contra su propio conflicto interior.
Presenta una batalla interna entre el bien y el mal y, este último, le tentará varias veces. Él no tratará de resolver estos conflictos directamente, sino que convivirá con ellos mientras resuelve el asesinato.
La perfección del típico policía que lucha contra el mal, como si se tratara de un héroe con capa, es para otro tipo de novelas. Aquí, el protagonista convive con su imperfección.
La violencia
La violencia es una esencia del género de la novela negra. Se palpa el miedo, la inseguridad y el conflicto continuo junto a escenas de extrema violencia en cada una de las páginas de la novela.
La brutalidad y la crueldad están muy presentes, ya sea, por parte de las técnicas que utiliza el detective o por el criminal.
Esto también se relaciona con el lenguaje utilizado en los libros. Rudo, vulgar, de la calle. El protagonista forma parte de este lenguaje que huye de los estándares más cultos. Varias veces, el policía pertenece al mismo mundo que los criminales.
La trama y el narrador
Acción y ritmo rápido de la trama. Todo transcurre a alta velocidad, como si se tratara de un thriller y, además, con grandes dosis de acción. Es más importante el desarrollo que el propio análisis de la investigación policial. Menos procedimiento y más tiros.
El narrador es una primera persona muy cercana, normalmente el detective o el policía. El ambiente es urbano en la mayoría de los casos porque es más fácil desarrollar un conflicto social en este entorno. El lector va conociendo los detalles del crimen en el mismo momento que el protagonista porque así se genera un mayor vínculo.
El desenlace de la investigación debe ser creíble, tener mucha verosimilitud y el lector debe ver que el autor domina la jerga criminal.
El referente de la novela negra
Hay varios autores de novela negra que han tenido mucho éxito, pero uno de sus máximos exponentes y el creador del género es Dashiell Hammett. Su obra más conocida fue El halcón maltés.
Subgéneros de la novela negra (o diferencias con otros géneros)
A medida que iban avanzando los años, han ido surgiendo adaptaciones de la propia novela negra que han derivado en subgéneros con varias similitudes y algunas diferencias.
Muchas veces los lectores, como tú, confunden la novela negra con alguno de estos géneros.
La novela policíaca
Presenta algunas similitudes como la investigación de un crimen. Además, el protagonista siempre es un policía, con lo que, a veces, ya no coincide al 100% con la novela negra donde no es un requisito esencial.
También hay un trasfondo de crítica social, pero ya no se retrata a la sociedad tan decadente o corrupta. Se suavizan las formas.
En cuanto a las diferencias, son varias. La investigación criminal tiene una gran relevancia, es el objetivo principal. A través de las pistas y del procedimiento policial se consigue detener al criminal.
La violencia es más difusa e incluso, en algunos casos, es inexistente. Hay menos acción y la trama es un poco más lenta. Se detiene un poco más en los detalles y en las descripciones, pero sin exagerar.
Uno de los referentes del género es la escritora Agatha Christie y su novela más importante es El asesinato de Roger Ackroyd.
El thriller y el suspense
Es una mezcla entre la novela negra y la novela policíaca. La similitud: hay un crimen, una investigación o un conflicto para resolver. Pero no es lo más importante.
Predomina la acción y el entretenimiento por encima del desarrollo de la investigación policial. La novela es caótica y la trama transcurre a un ritmo vertiginoso. Puede incluir más o menos violencia, según el autor.
A veces, la novela es narrada desde el punto de vista de la víctima. El autor introduce elementos de tensión durante la obra para ir acorralando al personaje principal.
Normalmente, la velocidad de la trama va en aumento y la narración contiene grandes dosis de tensión. Tiene varias similitudes con un guion cinematográfico.
Si tenemos que pensar en uno de los escritores más importantes de thrillers, este es John Grisham con El informe pelícano. Ha vendido más de 250 millones de libros entre todas sus obras.
Conclusiones
Como has podido comprobar a lo largo del artículo, es fácil confundir la novela negra con la policíaca o el thriller. Hay muchos nexos en común, pero no comparten todas las características.
La novela negra presenta una sociedad y un protagonista más decadente, rudo y vulgar, y la violencia es la protagonista.
En cambio, la policíaca suaviza las formas, hay menos violencia y el procedimiento policial es muy importante.
Finalmente, en el thriller, hay un ritmo de la trama vertiginoso y predomina el puro entretenimiento sobre el desarrollo de la investigación. Más que la violencia, la tensión es el elemento principal en este tipo de novelas.
Con este resumen, espero ayudarte a decidir tu próxima novela.